Lo primero que os puedo decir es que conducimos de manera natural, automática, simplemente centrándonos en la carretera: señales, desvios, otros conductores... Esto lo sabemos todos, es obvio. Pero cuando te toca cambiar de lado la cosa se complica y ese "automatismo natural" se vuelve un problema. Realmente es como volver a los primeros días de conductores ¿os acordáis? Pues yo si, porque acabo de hacer un "remenber" de la leche.
Desde que recogí el coche de alquiler hasta el ferry, tenia 17km por delante, de autopista y circulación a través de un pueblo y todo con el tiempo justo es decir poco. Así que tenia que ir sin fallos y sin equivocaciones de ruta (que las hubo claro) con lo cual te pones algo "nervioso".
Lo primero:
- En el coche la sensación es que está todo "al revés", siendo los puntos más problemáticos el retrovisor interior (no paraba de mirar hacia la ventana buscándolo) y la caja de cambios (para mi) al tener que cambiar con el brazo izquierdo.
- Las rotondas impresionan al principio, porque todo esta "contra natura".
- El margen izquierdo de la carretera es tu enemigo.
- Las curvas a la derecha, principalmente por las islas, son aventuras.
Todo esto implica que debas estar al 120% concentrado en todos los detalles: no solo en la nueva circulación, señales, rotondas.. sino que debes reajustar tus manías con los retrovisores, con no meter la marcha equivocada (mi guerra fue tremenda con la 1ª y la 3ª) y sobre todo controlar el margen izquierdo del coche puesto que de manera natural te acercas peligrosamente a ese lado (preguntar a mi chica, que lo pasó un poco mal los primeros días).
¿Alguna recomensación?... solo el que apliqué para aprender a manejar camiones: controlar constantemente el retrovisor izquierdo de manera que siempre veas el la línea que lo delimita. Si lo ves bien, no estás pegado, si no lo ves tu acompañante puede estar sufriendo un ataque al corazón. Y ante todo me repetía mentalmente: "por la izquierda, circula por la izquierda" porque incluso tras 6 días conduciendo unos 240km de media diarios, me sorprendía volviendo al lado derecho (me relajé con lo cual los hábitos volvieron) y ahí agradeces a tu copiloto el aviso.
De lo demás puedo decir que el escocés es muy cívico conduciendo, no escuché el claxon en 8 días (una sola vez, miento), y que respetan las señales de velocidad: si dice 40 millas, son 40 millas y punto pelota.
Tengo un recuerdo muy grato, sobre el civismo: nunca había dado las gracias y saludando tanto como en las islas debido a los Passing Place. Es decir, carreteras de un solo carril para ambos sentidos y que cada X metros había un apeadero para ceder el paso. UN GUSTO.
Recomendación final: un buen GPS (recomiendo el Copilot, MUY BUENO), calma y disfrutar de la carretera.
Escrito por MLM
